Ir al contenido principal

Claude Cahun Sin título (Autorretrato en vitrina), 1925

  


Claude Cahun

Sin título (Autorretrato en vitrina), 1925


Lucie Renee Mathilde Schwob nació en Francia, en Nantes, en 1894. 

Escritora, escultora, crítica, traductora, actriz, activista política y fotógrafa judía, también fue actriz de manera indistinta representando papeles femeninos o masculinos.

Lucie adoptaría el nombre Claude Cahun. Buscaba una nueva identidad y en la década de los años treinta jugó con los géneros sexuales en autorretratos que la presentan como mujer, hombre, andrógino o inclasificable. No pretendió provocar ni dar espectáculo, se trató de una búsqueda de sí misma.Una parte no desdeñable de su obra se ha perdido a causa de su detención por la Gestapo en 1944. Afiliada al movimiento surrealista, hizo de su vida una expresión artística contestataria que se enfrentó al régimen nazi. 

Crea ficciones con sus fotomontajes. Indaga en la androginia, la máscara y el espejo. Exploró, cuestionó, descubrió y construyó su propia identidad a través de la cámara. Su obra fotográfica es conocida principalmente por sus autorretratos performativos y sus instalaciones son precursoras de fotógrafos contemporáneos o de artistas plásticos como Christian Boltanski.

Su pertenencia al movimiento surrealista se vio superada por la búsqueda de la libertad personal. El ideal surrealista de belleza es la extrañeza, la repulsión y la incompatibilidad. La necesidad de rebelión en un mundo que es intolerable y de escapar a un mundo en el que no estamos en realidad y que construimos a través de la mente inconsciente.

Cahun cuestiona la idea de la identidad, el ser y su género, para ella es una noción mutante, que se recrea y se reinventa conforme nos conviene.

Así, ella entiende que la identidad es un molde, una máscara.

Cahun deseaba ser parte de un tercer género indefinido, en la frontera entre la homosexualidad, la bisexualidad y la androginia.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Mario Merz Igloo di Giap, 1968

  Mario Merz Igloo di Giap, 1968 Artista italiano relacionado con el arte povera . Empezó a dibujar durante la Segunda Guerra Mundial, apresado por sus actividades con el grupo antifascista, hizo frente común por el antielitismo y estubo a favor de crear obras con materiales humildes procedentes de los desperdicios de la vida cotidiana. Nació así el Arte Povera, el arte pobre, a propósito de la exposición colectiva celebrada en Génova en 1967 y, junto con el futurismo, permanece como uno de los más influyentes movimientos de arte italiano en el siglo XX. Este artista utilizó de forma frecuente la sucesión de Fibonacci en muchas de sus obras para simbolizar el arte y el progreso social, le permitía explicar y representar fenómenos biológicos, físicos, políticos y sociales de gran complejidad. Los temas artísticos de Mario Merz surgen de la devastación de la Segunda Guerra Mundial y de las grandes protestas europeas del siglo XX. El iglú es para Merz una metáfora con la que representa

Käthe Kollwitz, The Mothers (Die Mütter), 1923

  Käthe Kollwitz, The Mothers (Die Mütter), 1923 Kathe Kollwitz nació en 1867 en Königsberg, Prusia (actual Alemania). Vivió tanto la primera como la segunda guerra mundial. Trabajó principalmente en Berlín, no se permitía a las mujeres artistas entrar a las academias alemanas cuando se estaba formando, así que cursó sus estudios de forma privada en las escuelas de Munich y en Berlín. Está relacionada con el movimiento expresionista y su obra se caracteriza por su fuerte crítica social. Las miserables condiciones de vida de la masa obrera y su activismo político fueron los motivos en sus obras. El expresionismo nace sobre esta base de protesta y de crítica, pretende ser lo opuesto al positivismo, es un arte de oposición. Alemania en aquella época, cegada por el sueño de gloria y dominio marchaba hacia la guerra.  En esta obra vemos un conjunto de madres que se han convertido en una estructura compacta y contenida, madres unidas que protegen a sus hijos, un instinto maternal primordial.

Neoclasicismo y Frankenstein

  La muerte de Sócrates  Jacques-Louis David. 1787 129,5 × 196,2 cm Museo Metropolitano de Arte, Nueva York, Estados Unidos  Neoclasicismo  Óleo sobre lienzo  Es una pintura narrativa de gran formato con una concentración de personajes en el centro que presentan una gran teatralidad y un alto cuidado en los detalles. La composición está bien ordenada, el dibujo resulta dominante en comparación con el colorido y éste se basa en una gama cromática más bien oscura que otorga solemnidad a la escena. Sócrates es el centro de la composición y su posición está remarcada por el uso de la luz que llega desde un foco que no podemos apreciar pero incide directamente en el protagonista. La esposa de Sócrates puede verse lamentándose sola fuera de la habitación. Platón (que no estaba presente cuando murió Sócrates) está representado como un anciano sentado al final de la cama.  La obra representa la escena de la muerte del filósofo griego Sócrates, condenado a morir bebiendo cicuta por haber expres